caminando como los gentiles (es decir, como los no creyentes, no cristianos) caminaban, pero ahora llegando a ser cristiano, has aprendido de Jesucristo, estás renovado por su Espíritu, y como consiguiente ¡ya no debes vivir como viven los gentiles! Necesitas dejar los hábitos, patrones, y estilos de vida profanos, y debes vestirte de los hábitos, patrones y estilos de vida piadosos. ¿De qué serviría un mandamiento de Cristo para sus redimidos que es imposible de obedecer? Pablo exige que cambien
Page 6